Fernando (izquierda), Josue (derecha)
Common Hope | Familias de Esperanza
El equipo de vivienda de Common Hope (FDE) está experimentando actualmente un momento emocionante e innovador con numerosos proyectos pilotos en marcha. En 2021 con la ayuda del equipo de trabajo social, encuestaron a las familias para identificar las necesidades actuales. Esta encuesta proporcionó información crucial para el programa de vivienda, ya que identificó las preocupaciones de las familias. Los comentarios de las familias ayudan al programa de vivienda a crear soluciones especialmente adaptadas a sus necesidades.
Instalación de una estufa de bajo consumo de energia.
La encuesta afirmó que muchas familias todavía carecían de suficiente espacio para vivir, vivían en hogares con una contaminación del aire insalubre debido a que se cocinaba a fuego abierto y no tenían un área designada para que sus hijos estudiaran y completaran sus tareas. Debido a este resultado, han estado probando nuevos materiales y diseños de distribución de viviendas, y han invertido en 45 escritorios que se instalarán en los hogares de las familias más necesitadas.
Liderando estos esfuerzos están Josue Sican y Fernando Santos, quienes han trabajado en Common Hope (FDE) durante más de 18 años. Fernando compartió que como programa, es crucial que busquen formas de mejorar las condiciones de vida de las familias. Priorizan encontrar soluciones a cualquier problema que pueda incomodar a las familias para crear hogares más seguros y estables.
Fernando y Josue viven en San Juan del Obispo, una comunidad que también alberga familias de Common Hope. Ayudar a su comunidad local tiene un significado importante para el dúo, ya que han sido testigos de primera mano de los efectos positivos que la vivienda ha tenido en sus vecinos y amigos.
Los voluntarios del Equipo de Visión ayudarán a armar los escritorios que fueron entregados recientemente.
«Algunos de los programas de Common Hope tardan muchos años en ver impacto, pero el impacto del programa de vivienda puede ser instantáneo. En una semana podemos construir una casa y eso puede brindar alivio inmediato a las familias», compartió Josué.
Más del 25% de los guatemaltecos viven con menos de 2 dólares al día, por lo que mejorar su situación de vivienda puede ser un desafío. A menudo, las familias deben priorizar otros gastos esenciales como comida, ropa o alquiler. Pero gracias al apoyo de Common Hope, las familias pueden dar prioridad a la educación de sus hijos al tener un lugar seguro al que llamar hogar.
«En nuestro programa las lágrimas de frustración y tristeza se transforman en lágrimas de felicidad», dijo Fernando.
¡Un hogar seguro y digno realmente puede cambiarlo todo!
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